Parados junto al patova de traje y corbata, hacían puerta la gente vestida de negro, con bermudas, tachas y algunos parches de Los Ramones. Así se esperaba en la vereda el comienzo del recital que contaría, ni mas ni menos, que con 5 bandas. La noche es larga y la birra ya está cara para un fin de mes de lucha en contra de políticas que golpean duro el bolsillo del asalariado.

En cuanto se escuchan los primeros acordes todos reconocen que abre el espectáculo Muerto en Pogo. Rápidamente entran todos para poder corear esas canciones y levantar el puño al grito de Qué va a cambiar. Con unas luces bárbaras y una lista ejecutada a lo correcaminos se despiden tocando Perros asesinos. Luego de MEP sigue Harto de Vos, manteniedo la fiereza y la velocidad que en la previa nos prometían. Su formación contaba con sólo una guitarra, sin embargo no impidió que hicieran un tema instrumental donde todas las luces lo enfocaron. Entre saltos y puños al aire cerraron su presentación para darle lugar a la banda cumpleañera.

Mientras nos encontrábamos con amigos desencontrados en el tiempo, arriba del escenario se acomodaban Los Pilotos para comenzar su show. Desde el primero de los acordes entregaron todo a lo que nos tienen acostumbrados. Con su dinamismo característico no dejaron de sacudir Mono para dejar bien en claro que 20 años para algunos puede no ser nada, pero para ellos es un montón. Ahí, delante nuestro deplegaron toda la experiencia y timing q se tienen para mostrar un juego asociado envidiable hasta por el Borussia Dortmund. Haciendo rodar un hit atrás de otro, con los cuales armaron su lista.

Los prosiguió Mercado Nocturno, otros ricos nenes que cuentan con la velita de plata ya soplada en este mismo año. Así, en una continuación de formaciones experimentadas supimos disfrutar el punk rock con sabor a cebada. Para el cierre del show en vivo se treparon a los tablones Los Beretta para golpearnos en la cara con todo su Ska. Y así, tambaleando o bailando al ritmo de las canciones lanzadas por D.J. whiterabbit nos alejamos hacia otra semana que pelear, pero con la confianza que tras ella habrá otro fin de semana para saciar nuestra sed. Con lugares de encuentro, de lucha y eso que más nos gusta.

Cabezón N° 27