Una idea es como el yuyo, una vez que lo ves, ya está, no vas a dejar de verlo crecer. Y moverse, y transformarse, y habitar lugares y enredarse con otros.

Una idea, entonces. Y una olla donde meter lo que hay en la heladera (lo nuevo, lo viejo, la que va). Dejarlo empaparse, a fuego lento, pero sin parar de revolverlo, de agitarlo, de disfrutarlo.

Y mientras se nutre del aroma del encuentro, cuatro pibas cocinando un disco.

Y dos pibas rompiéndola en los platos.

Y cinco pibas que cayeron desde lejos para el brindis.

Rosario viene latiendo fuerte de sentidos propios, de producciones locales y de escenarios llenándose con las que faltaban (https://www.youtube.com/watch?v=Hc7s8Lo_lQM).

Muchas, tantas, juntas, estamos sacudiendo el ritmo de los días y el sabor de las noches. Durante demasiado tiempo nos quisieron vender mierda, ya es hora de cantar la posta!

En un viernes estrellado, el vientito del otoño nos amontonó (nuevamente) en la Asociación Japonesa. Ahí, nos recibieron dos mesas de fanzines, libros, remeras y posters de la mano de La Ciudad de Las Mujeres y la banda invitada. Bancamos la mecha, y bancamos la feria!

“Va Como Piña” es una movida autogestionada, un pogo sensacional de resistencia musical, una bomba. Llegar es como sentirse en casa, quedarse es un camino de ida. Su banda sonora es producto de bocha de trabajo y pasión, una fiesta a punto de hervor convocada por las Alto Guiso, las divas del hip-hop post-apocalíptico rosarino.

Ellas son Ani Books (voz y loops), Sofia Pasquinelli (guitarra y voz), Flor Crocci (bajo y voz), Melina Spizzirri Sinte (trombón y voz) y otros condimentos amigos que colaboran en sus producciones.

Vienen de cruzar voces, fusionar beats y mezclar ritmos, guisos de por medio.

Como cuenta Ani Books en una entrevista, “es un caldo de amor, un escudo de hermanas haciendo música”.

Lo que hacen, una auténtica explosión de sabores.

Nos abrieron las puertas de la noche con Psicoguiso, su flamante ensamble de 13 canciones que si de suerte hablamos, trae mucha y de la buena. Y sí, los bailamos todos!

Entre banda y birra, las Mona con Navaja nos movieron el esqueleto con sus clásicos mix de hip hop para tirar pasos como si nadie estuviera mirando.

Ellas son Paula Picech y Celeste Savoretti.

Lo que hacen, guiar la danza de los pies hasta los sesos.

Y porque es tan lindo cruzar fronteras para cruzarse, esta vez las invitadas fueron las Kumbia Queers y llegaron a calentar la pista de la celebración con su punk tropical para descaderarse del amor.

Ellas son Inespector (batería), Pat Combat Rocker (bajo), Pila "Zombie" Jackson (guitarra), Juana Chang (charango y voz), Flor Linyera (teclado).

Vienen de un lugar sensacional, lleno de chicas que agitan, de humor y de crítica, de risa y de fuerza. Un estupendo arcoíris de cumbia punk para saltarlo y soltarlo todo.

Lo que hacen, en sus palabras, la voz sin miedo, un tsunami de alegría y liberación.

Así, noche tras noche, disco tras disco, movida tras movida los escenarios se transforman y se agigantan, se enriquecen y se comprometen.

Con ellas. Tomando los espacios, luchando con las letras, haciendo magia en la música.

Con nosotras. Bancando la contracultura autogestiva, haciendo el aguante y poniendo el cuerpo en la(s) pista(s) y en las ferias.

Todas y cada una.

Una banda de pibas que no paran de crecer.

Crónica:  "La Tana" Lucía Cúneo

Registro visual: Anahí Cabeza