Megáfona: El teatro será deseado o no será

Tras el acto de apetura, FAER tuvo su primera noche de teatro, con la presentación de Megáfona en el CCPE.

Argentina probablemente sea el país más intenso del mundo. Veinte años en Argentina equivale al doble de cualquier otro, no solo por el ritmo de vida que se lleva sino por el tipo de acontecimientos que suceden. El que lo ve de afuera, bien podría pensar en un bucle constante entre los peores y mejores momentos. Pero si hay algo que caracteriza al argentino es no quedarse con los brazos cruzados; es por eso que los primeros minutos de “Megáfona” son dedicados a la extensa lucha y proceso para la legalización del aborto. El hilo conductor que acompaña la casi hora y media que dura esta obra son las experiencias de cuatro chicas en el amor, en distintos momentos de las últimas dos décadas de historia.

Alejado del teatro tradicional, las protagonistas interactúan con el espectador a lo largo de toda la obra; pidiendo aplausos, locaciones o sorprendiendo con el giro que toman las historias. De igual manera, el juego de luces no se limita al escenario sino a la totalidad del auditorio, ya que varias reacciones requieren ver directamente al público.

La escenografía no es fija sino que se adapta al arco de cada chica. Unas cajas que en principio no representan mucho, terminan funcionando como proyector para imágenes de manifestaciones, protestas, mensajes de aliento o como parte de la cocina de una casa, un auto o una ducha. Algo cuestionable refiere al equipo de sonido ubicado en el extremo derecho del escenario; tanto por la acústica del teatro, que no requería micrófonos convencionales, como por el embrollo de cables que dificultó el ritmo en algunos cambios de escena. De todos modos, la utilización del equipo fue algo secundario y no afectó partes cruciales de la obra.

“Megáfona” ofrece un espacio para la anécdota, para alguna que otra risa, pero por sobre todas las cosas da espacio para la reflexión con ejemplos crudos y no por eso menos reales. La luchadora se enorgullece del camino recorrido y los derechos conquistados, pero sabe que nunca hay que bajar los brazos.


Texto: Nicolás Giannassi
Fotos: Mariano Ferrari

 

Este material fue realizado por estudiantes de la carrera de comunicación social de la UNR a través de un proyecto de extensión con la cátedra de redacción a cargo del Dr. Orlando Verna.

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