El ambiente está libre de humo pero el fuego consume la mente. Están quienes saben que a las 21:30 la noche está en pañales, otros arriesgan a llegar más tarde para romperse el mate. Están quienes tuvieron la oportunidad de sentir el power en vivo, otros ansían el momento histórico del reencuentro. Todos juntos, en Rosario, escenario elegido para darle la bienvenida a su país. Precisamente, el Teatro Vorterix. Y sí. Es el camino real del reencuentro de una de las bandas más influyentes punky-reggae del under argentino. Llamen al enterrador porque Todos Tus Muertos vuelve. Se respira euforia y se huele la llegada. Una espera apetecible que se concreta a las 23:30. La apertura con “Torquemada” desata la furia de su melodía criminal haciendo estallar el pogo y moviéndose siempre sobre ese caldo de cultivo con el tema que le sigue: Adelita. Sin dejar de arengar pasean por todos los discos donde está Fidel, con temas asesinos como “Mate”, “Dale Aborigen”, “Gente que no”, “Trece”, “Sé que no”, “Hijo Nuestro”, “Carne de Cañón”, “Dignidad”, “Lehenbiziko bala”. Es Todos tus Muertos que rockea en el salón, con un juego de energías desopilante. “¡Subo para arriba, bajo para abajo, conmigo o sinmigo alguien te hará los cantos!”. Así se vive, como se siente. Eo eo eo. El punk y hardcore contestatario en sus letras carga con tanta crítica social que puede entenderse como una alianza táctica con el reggae. Es decir, el odio al sistema imperante a quienes los rastas llaman Babylon. En éste caleidoscopio donde TTM muta los géneros y las bases ideológicas, con un mensaje de paz y amor, se vislumbra una influencia de la cultura Rastafari en su último disco del año 2000. Se percibe esa elevación cuando por momentos el paseo se torna más suave con una impronta excepcional: “No te las vas a Acabar”,” Todo lo Daría”, “Rasta vive”, “Besos de Seda”, “Mandela”, “Asesinos Profesionales”, “Fallas” Con más de dos horas de recital escupen todo lo acumulado después de 16 largos años, paseando desde el punk, hardcore, reggae y raggamufin. Con todo su esplendor, la reunión histórica parece ser una alucinación pero ahí están TTM, ¡todos a despabilar y el que no se despabila se va a tener que levantar! Con su mejor actitud a pesar de la ausencia de Villafañe, TTM brinda un show de honestidad pura rememorando su rica historia para dejar en claro que vuelven con todo a la escena. Vuelven de nuevo, sin importar el juego. Se levantan Todos Tus Muertos. Eso es dignidad.