El periodista estrella del poder mediático en su programa prime time criticó que el Estado subsidie con 360 millones de pesos al año a los estudiantes extranjeros. La justificación del ajuste en educación mediante la xenofobia.
¿Ahora les molesta que el Estado invierta en la educación de los extranjeros? El Estado este año gastó aproximadamente 76.000 millones de pesos (el doble de lo que se gasta en la Asignación Universal por Hijo) en subsidiar a las petroleras. En su mayoría multinacionales extranjeras. Y el acuerdo lo firmó el Ministro Aranguren, ex CEO de Shell. Pero para ellos el problema son los estudiantes extranjeros, que viven acá, trabajan y aportan a la economía.
Pero llevemos el tema al plano de lo humano: a mí me llena de orgullo que mi país forme profesionales para toda Latinoamérica. Que nuestros hermanos puedan tener médicos formados acá que ejerzan en sus países, es un bien para la humanidad. Son personas, no son números.
En Argentina tenemos universidad pública y gratuita de alto nivel, y eso deberíamos valorarlo más. No pasa en todos lados. En la mayoría de los países sudamericanos la educación pública es paga, y es de menor calidad que la privada, que es mucho más cara. En Chile, donde los profesionales se endeudan durante toda su vida por haber estudiado, los estudiantes pelean por una educación pública real hace años, y perdieron varios compañeros en esta lucha, asesinados por los carabineros (sí, esos que vinieron a educar a la policía de Santa Fe).
En la educación también se viene otro ajuste importante, acompañado de represión (como ya les tocó a los jubilados y a las mujeres). El periodista estrella del poder mediático, avala el ajuste educativo mediante la xenofobia. El ciego repite, y se queja del kiosquito peruano, del trabajador paraguayo, del estudiante colombiano. Pero no dice nada de la multinacional yanki que te vende el gas carísimo y se lleva toda la moneda.
El ajuste no lo pagan las empresas, lo pagamos nosotros, porque el gasto público somos nosotros.
Por ahí leí alguna pintada que decía: el que te roba es empresario y rico, no inmigrante y pobre.
Fijate de que lado de la mecha te encontrás.
Texto: Gonzalo Luján.