Salí de mi casa y encaré con la bici por Richieri mientras caía en la cuenta que hacía muchísimo no escuchaba música en vivo, siendo conciente de lo bien que eso me hace desde el punto de vista más integral. Mi bici me trasladaba al ansiado fin de ese receso de recitales, al CC Güemes, donde Caliope Family brindaría la primera de sus cuatro funciones.

Me acomodé en mi mesa, y como estaba cerca de la entrada, empecé a ver entrar a mucha de esa gente linda que me encontraba más que todo en estas situaciones. Y entre tanto encuentro, se fueron moviendo algunas siluetas en el oscuro escenario. Golden Boyz estaba listo.

El trío de MCs integrado por Troubless, Sirio y Varoner salió a prender fuego las tablas, demostrando que se convierte en un cuadrado exacto con Irivrte encargándose de la parte instrumental. Con toda la potencia que les caracteriza sacaron a relucir su fuerza y sus rimas, mientras que el turco pinchaba esas bases que hacían levantar las manos del público cuando uno de los Golden lo requería.

Hicieron sonar grandes temones, como los adelantos de lo que será Tesoros en la Tundra, dando lugar a relucir las líricas de cada Golden. Pasaron varios invitados a aportar lo suyo, como Bruno Introini y Ialec OG, quienes pasan a ser parte la formación actual de GBZ, según me cuenta Tathidro, colaborando con esta nota. El broche de oro fue la invitación a Brapis a subir, para interpretar Rosario Barras en conjunto.

El ambiente quedó caldeado en el mejor de los sentidos, para la llegada del plato fuerte, y tras un receso para puchos e aire, las siluetas se hicieron presentes una vez más, y de un tirón las luces se encendieron con U Know. Caliope Family arriba del escenario, quien te lo trae caliente pal barrio.

Los meses de inactividad no desafinaron la calidad de la Family, que suena como si ensayaran un show entero todos los días. La mejora se nota constantemente, en el crecimiento instrumental de cada integrante, así como en la claridad y potencia del Brapo para soltar sus rimas.

Altibajos emocionales, entre la suavidad que te dan canciones como Profundo, Si te digo y Palabras y la fuerza que te incita a revolear mesas con bombas como Llantas, una nueva versión más pulenta del Outro de su primer EP y hitazos del Brapo como Monedas 2, esa que relata la realidad de superación de aquel pibe que se subía a los bondis a intercambiar rap por monedas, y hoy junta views de a millones en YouTube.

Sonaron casi todos los temas que se podían esperar: los de Rhythms and Rhymes, los de Chainz, algunos singles y adelantos de lo que se viene. Las voces de Frane, Acru y Urbanse aparecieron en forma de pistas disparadas por Cofran Olima, y hubo un momento para invitar a Dante Farías “quién hace un tiempo viene rodando con su disco Blood of Fury. Una joven promesa de la ciudad, que samplea temas de Virus, Cerati”, en palabras de Tathidro.

Caliope Family sigue demostrando un nivel superlativo para lo que es la historia del hip hop en Rosario, y demostrando que tiene todo para posicionarse en un plano nacional y de habla hispana en general. En lo personal aprecio mucho a las bandas orgánicas e instrumentales con un MC de frente, porque creo que es una mixtura riquísima entre los universos instrumentales y el mundo del hip hop que viene a llevarse todo puesto. Caliope realiza esta mezcla con una delicadeza deliciosa, pero sin nunca abandonar la potencia que lo caracteriza. Todavía no tenemos idea cuál será el techo de esta banda.

El mensaje es conciso y sin vueltas. Caliope crece a pasos agigantados. Rosario lo disfruta y afuera lo precisan.

Texto: Gonzulu
Foto: Giulia Antonelli