Los raperos canarios Cráneo y Lasser, referentes del rap lo fi español, llegaron a Rosario en el marco de su gira latina.
"Con la nube encima pero el cielo despejado", así nos recibió el CC Güemes cuando atravesamos la puerta. Recién comenzaba el esperado show de Cráneo y Lasser con los beats de Gonzo, ese show que se viene posponiendo hace dos años, y que tuvo su certera fecha este viernes 25 de marzo.
América Latina entera con la mente en strike, ahora sí. Es que la parte B de este Latin Tour (la parte A fue el año pasado), comenzó el 3 de febrero en México, y de ahi comenzó a bajar por Guatemala, Panamá, Colombia, Perú y Chile, para así llegar a nuestro país, donde los MCs canarios recorrieron las ciudades de Resistencia, Buenos Aires, Cipoletti, Bariloche, San Luis, Mendoza, San Juan, Rosario y Córdoba, cruzándose al Uruguay para dar su show en Montevideo. Y la cosa no terminó acá, porque ahora comienzan a subir de vuelta para finalizar la gira pasando por Ecuador, Costa Rica y cerrar el trip en Ciudad de México.
Y en Rosario la cosa fue de alto vuelo y buenos humos. La sensación más chill y relajada que te puedas imaginar, pero a su vez siendo muy divertido, sin que ese relajo te mande a dormir ni mucho menos. Es bien arriba la cuestión, rica. Casi la misma sensación que siento cuando escucho sus temas en casa, en el sillón, bajando después de un día largo, pero con la emoción de verlos tirando sus rimas arriba del escenario.
Los beats de Gonzo son una delicia, con ese sonido a cinta girando, lo-fi: la belleza de lograr sutilmente lo rústico. Mientras Cráneo (a.k.a Sloth Brite) recorre el escenario rapeando y le pasa la posta a Lasser para que se luzca entre rimas y paseos. Y el estribo lo agitan juntos casi que saltando.
Entre baile distendido el público se prende uno bien gordo, uno de los tantos que rolaban, y se lo giran a Cráneo, que le da un par de secas cerrando un tema, y se le cae. Nos cuentan que esta gira fue un sueño, que hace casi dos meses que estan pateando nuestro continente, y que de tantas buenas vivencias, se está cocinando un nuevo disco, Diablos y Bermudas, que esperamos para escucharlo como siempre, con luces cálidas y algo rico.
El humo se condensaba y subía como el ánimo generalizado, y llegaban de a poco los últimos temas, mientras se pasaban una grabadora VHS que proyectaba en la pantalla lo que registraba. Lasser la aprovechó para mostrar sus dotes en el finger skate (sí, ese skate chiquito que se usa con los dedos), y realmente estuvo a la altura del agite de la gente.
Me parece interesante destacar de su música y de su forma de interpretarla, que la usan expresando lo bueno que es vivir su vida (como muchos raperos lo hacen), pero no ostentando riquezas como plata, joyas y ropa cara, sino expresando cómo es su forma tranquila de vivirla, chill como su sonido, sin preocuparse tanto y disfrutando del paso de los días. No sé si eso es algo bueno o no, pero si sé que es algo que se distingue, entre tanto MC alardeando sus lujos a tal punto que se vuelven un poco asquerosos.
La gente cada vez más arriba y ellos también. Suena Bahía y nos balanceamos sonrientes. "Quiero dormir a tu lado pero tengo el sueño cambiado". Y se van, a la clásica espera del pedido de un tema más. Entre la oscuridad aparece Sloth Brite, caza el micrófono y queda paralizado y en silencio hasta que Gonzo lanza el beat, y canta "Ando por la calle bien guay". La gente salta, en ese pogo suave único del lo-fi hip hop. Buena despedida.
La música baja, foto con la gente, mucha alegría, suben las luces y el DJ pone un tema. Buscan sus cosas para despejar el escenario, y entre todo eso Cráneo se prende uno de los suyos, de esos grandotes, para darle un par pitadas y pasárselo a la mano del público que estaba más cerca. Y se festeja, y se salta, y gira.
Diversión chill, buenos humos y rimas relajadas. Un poquito de esa vida que viven en Canarias y de la que hablan en sus canciones fue lo que trajeron esa noche a Rosario, para que se encapsule en el Güemes y se respire colectivamente, mientras se baila y se goza.
La playita de Canarias estuvo por un ratito en Rosario. Es verano todo el año, vamos al agua.
Texto: Gonzulu
Fotos: Gabriel Lovera