La ciudad de San Luis fue la sede que dio muestra de que en este simbólico y esperado octubre, mes en el que desde hace 35 años se desarrollan los históricos Encuentros en los que cientos de miles de mujeres, lesbianas, travestis, trans, bisexuales, intersexuales y no binaries compartimos saberes, experiencias, y luchas, nos seguimos abrazando.
El último encuentro se produjo en La Plata en el 2019, debido a la pandemia, pasaron dos años sin que se llevara a cabo . Este 2022 nos encontró a distintas generaciones transitando las calles, las plazas, las universidades y distintos sitios emblemáticos de la ciudad de San Luis, donde 135 mil personas se acercaron a participar del encuentro.
El clima acompañó y las calles se colmaron de cantos y colores durante tres días, fuimos convocades a tomar la palabra y a escuchar, a debatir y a consensuar, a teorizar y a hacer catarsis, a debatir estrategias y conclusiones, a marchar y a sentarnos en círculos, a llorar y a bailar, a reír, a abrazarnos, a ponerle el cuerpo a uno de los hechos políticos más originales del feminismo argentino.
Esta 35◦ edición se desarrolló en un contexto que respeta el derecho a la interrupción voluntaria del embarazo. Otra de las novedades fue la oficialización del cambio de nombre: inaugurado en 1986 como Encuentro de Mujeres, a partir de 2022 el Encuentro se reconoce formalmente Plurinacional de Mujeres, Lesbianas, Trans, Travestis, Intersexuales, Bisexuales y No Binaries
Entre los temas principales se remarcó la visibilidad por la búsqueda de Guadalupe Lucero, nena de 6 años que desapareció en Junio del año pasado y el pedido de Justicia por Florencia Magalí Morales y todas las mujeres asesinadas en San Luis y el resto del territorio nacional. También se levantaron las banderas exigiendo con vida la aparición de Tehuel de la Torre, la liberación inmediata de las presas políticas mapuche y consignas contra el extractivismo y los transfemicidios, entre otros reclamos.
En un contexto donde la derecha avanza y recrudece, este encuentro nos permite volver a marcar la agenda de lucha, ganar las calles y alcanzar nuestras reivindicaciones. Como todos los años, los talleres fueron el gran atractivo para generar debate y retomar problemáticas de agenda. L a oferta incluyó 105 talleres agrupados en 15 ejes temáticos. Se realizaron dos días de intercambio abordando distintas temáticas con la finalidad de sacar conclusiones y con la posibilidad de que todes participen en igualdad de condiciones.
El sábado por la tarde comenzaron las marchas. Desde la Plaza del Carmen nos movilizamos miles bajo la consigna “Basta de travesticidios y transfemicidios” con Lohana Berkins y Diana Sacayán impulsando cada paso. Recién en el 29avo Encuentro Nacional de Mujeres en Salta se logró la participación de las mujeres trans en el encuentro y en un contexto en el que ciertos movimientos biologicistas y transodiantes encuentran nuevas voces la fuerza de la furia travesti más que esperanzadora se nos hace indispensable.
El domingo pasadas las 18hs se realizó la 35 marcha del encuentro plurinacional de mujeres y disidencias, la cual se extendió por más de 20 cuadras al canto de: “Qué momento, qué momento, a pesar de todo les hicimos el Encuentro”. Entre el atardecer que caía y la luna llena que se asomaba, miles de mujeres y disidencias avanzaban al ritmo de la lucha y el grito colectivo. Una imagen que quedará en el recuerdo de todes por largo tiempo.
El día lunes se llevó a cabo el cierre y se celebró la elección de la próxima sede por aplausos, donde por ovación, el movimiento de mujeres y diversidades decidió ir a Bariloche ante los atropellos a las mujeres mapuches.
Luego de dos años de ausencia, el encuentro regresa para remarcar y recordarnos que unides y con los puños en alto le hacemos frente al capitalismo, el extractivismo y la heteronorma, que la salida es colectiva y que para romper las estructuras que nos habitan, primero hay que cuestionarlo todo.