La sala Empleados de Comercio abrió sus puertas para recibir a uno de los espectáculos invitados del FAER. Se trata de la coproducción argentino-uruguaya “La Sapo”, dirigida por Ignacio Tamagno y protagonizada por Sofía Rivero y Emilia Díaz.
Crónica: Camila Sala
Fotografía: Gabriel Lovera
Como si fuese un ajuste de cuentas, las actrices toman la escena para repasar las penumbras de aquella historia familiar que constituye la dramaturgia de la obra y conmovió al auditorio del teatro Empleados de Comercio cerrando la cuarta jornada del FAER en la noche del sábado. Son una abuela y una nieta que se encuentran una vez más para hablar, llorar, reír y remendar el camino de su propia vida.
En ese sueño, el escenario se transforma en un jardín lleno de tierra donde el tiempo pasa de forma incalculable. La joven, verborrágica, pidió rápidamente a los presentes que cierren los ojos y que imaginen abuelas, muchas abuelas, todas juntas y sonrientes. Así arrancó el delirio onírico a meterse suavecito por la subjetividad de cada oyente.
La simpleza de la puesta de luces fue ideal, tenue y precisa, sumada a un par de viejos sillones de jardín, formaron, escena tras escena, el entorno adecuado para esas anécdotas que entre ternura, dolor y melancolía se hicieron carne. La obra recorre el vínculo familiar del lazo materno, la crianza de los chicos, el cuidado de los adultos, y es imposible no sentir entrañable y propia la narración.
“La Sapo” es un espectáculo completo. Es evidente que el trabajo y el entrenamiento para su creación fue intenso y meticuloso. Desde la escritura del texto, que es una delicia palabra por palabra, su circulación, el criterio estético y hasta la coordinación cómplice de las actrices, confluyen en un ritmo de altibajos que mantuvo expectantes a los espectadores.
La puesta fue una experiencia efímera que transitó absolutamente todas las fibras emocionales de quienes estaban presentes. Esas actuaciones representan hoy el inconsciente colectivo de todas las abuelas y nietas de la tierra, la resistencia de las mujeres, la templanza con la que habitaron sus vidas y la cantidad de sapos que se tragaron, tomaron la revancha sobre las tablas.
Dramaturgia y dirección: Ignacio Tamagno
Asistencia de dirección: Vachi Gutiérrez
Diseño integral: Tati Degenaro
Elenco: Sofía Rivero y Emilia Díaz
Producción: Sofía Antonaz
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Este material fue realizado por estudiantes de la carrera de Comunicación Social de la UNR a través de un proyecto de extensión con la cátedra de Redacción a cargo del Dr. Orlando Verna.
Contacto: Gonzalo Luján