Un 19 de octubre de 2016 las mujeres paramos. Día que para la historia argentina no será otra fecha más,  

Con una lluvia intensa en casi todo el país, a las 13hrs. comenzó a escribirse este día histórico, la consigna era clara: vestirse de negro buscando un impacto visual, durante una hora cesar las actividades del ámbito laboral y doméstico y hacer un "ruidazo".

 A partir de las 17hrs  una concentración masiva en la Plaza San Martin de la ciudad nos encontró reunidas: diferentes clases sociales, edades, etnia o cultura con el fin de marchar hacia los tribunales provinciales, buscando visibilizar y concientizar a la sociedad sobre la problemática de la violencia machista.

Nos movilizamos en contra de los femicidios, que en los pocos días de Octubre se llevó la vida de 19 mujeres, una muerte por día, en un mes, de tan solo un año. Las mujeres le pusimos el pecho a la situación que nos desgarra con un solo grito: "VIVAS NOS QUEREMOS".

Paramos: porque la culpa no es nuestra, no fue de Lucia Perez, ni de Diana Sacayán, como de ninguna de las mujeres, lesbianas, gays, trans, travestis asesinadxs. Tampoco de las reprimidas en la marcha del 31ªEncuentro Nacional de Mujeres. Porque es clara, hay un mecanismo de disciplinamiento y control, si incumplimos con los roles que la sociedad patriarcal nos atribuye hay una mano “moralizadora” que lo hace saber-sentir sobre nuestros cuerpos: se nos controla, se nos pega, se nos mata, se nos tira balas y gases. Pero, ¡ojo! nosotras provocamos, nosotras decimos que NO, nosotras estábamos solas de noche, nosotras pintamos las paredes y a los gritos cantamos contra la Iglesia Católica. Ahí está otra vez la culpa hacia nosotras, que se justifica y avala mediante ese dispositivo que nos convierte día a día en sujetxs-sujetadxs.

Paramos ante un Estado ausente,  por lo tanto cómplice. Exigiendo políticas públicas claras y efectivas para la real implementación de la Ley de Prevención, Sanción y Erradicación de la Violencia hacia las Mujeres (nº 26.485). Demandamos la real aplicación de la Ley de Educación Sexual Integral (nº  26.150) herramienta fundamental para la construcción de la identidad sexual desde la perspectiva de género, en niñez y adolescencia - pilares básicos para la construcción de una sociedad más libre-.  Nos declaramos en contra  de la reforma hacia la Ministerio Publico Fiscal, que elimina la Unidad Fiscal Especializada de Violencia hacia las Mujeres (UFEM) -única en abordar investigaciones de femicidios y violencias contra mujeres, lesbianas, gays, bisexuales, travestis, transgénero, transexuales e intersexuales dentro del país-

Paramos para decirles bien fuerte: "Si nuestra vida no vale, produzcan sin nosotras". Somos columna de una economía, que nos precariza día a día,  las cifras siguen indicando desigualdad salarial en relación a los hombres, ante una misma tarea laboral. Lo mismo en el trabajo doméstico,  donde destinamos más horas no renumeradas que generalmente el hombre no realiza.

Con el avance de las medidas neoliberales de ajuste estructural, sentimos la violencia económica perpetrada, somos las primeras en sentir la desocupación: si el promedio en Argentina de desempleo es el 9,3%, los valores en cuanto a las mujeres es de 10%.

Varios se preguntaran ¿qué tiene que ver esto  el marco del #niunamenos?  Si la economía se sigue sosteniendo con corte machista, las mujeres vemos limitada nuestra libertad. Y es asi que vivimos la violencia no solo psicológica, física, sexual, simbolica sino también económica por parte del Estado y muchas veces del hombre que nos oprime.

¿Entonces? ¡PARO!

Paro el silencio cómplice del Estado.

Paro al neoliberalismo que feminiza la pobreza.

Paro el macho que nos pega, nos viola, nos acosa, nos controla.

Paro, por las que ya no están.

Paro, para gritar: ¡Declaración de Emergencia Nacional contra la Violencia Machista, YA! 

PARAMOS porque VIVAS Y LIBRES NOS QUEREMOS

Texto: Florencia Aguirre Valdez

Imágen: Planeta Cabezón